Pereza es cuando el volumen de la radio está demasiado alto, o demasiado bajo, y te resistes a levantarte para girar la rueda.
Pereza es cuando ya estás en la cama y te has olvidado de lavarte los dientes.
Pereza es el despertador por las mañanas, ni que decir tiene, y sobre todo en invierno.
Es que el invierno no es una buena época para la pereza.
Pereza es cuando tienes que leer esa carta oficial, ordenar el armario de las sartenes o coser los bajos de los pantalones.
Pereza es, sobre todo, cuando tienes que juntar todas las fuerzas para enfrentarte al miedo y disponerte a estar tranquila. Reafirmarte en los argumentos, esos que son tan lógicos como huidizos. Y convencerte de que estás en lo cierto, encauzar las ideas, dejar los ojos abiertos, desperezarte.
Pero el invierno no es una buena época para la pereza. Eso es seguro.
6 comentarios:
En el invierno tenía unas ganas tremendas de invernar!
Que la pereza no te supere, y te lo dice una perezosa empedernida!
Pufff, ahora mismo estoy en el sofá, queriéndome levantar para ducharme...
¡Qué pereza!
Aun así, hay ciertas perezas que no debemos dejar que nos superen... Los ojos abiertos tenemos que tenerlos siempre.
Un beso! W.
2 horas 40 minutos estuvieron sonándome los despertadores el otro día y yo, por perez no podía levantarme, quería volverme a meter en los sueños, en el plumón, qué malo es el frío de Granada para levantarse...
el invierno ralentiza la vida, es ley..jaja yo soy re contra perezosa en invierno y verano..beso!
PErezón total!
Neni, qué pasa con el blog?
¿Qué tal la vida?
Muchos besitooos!
Joé de verdad, desde que no tengo facebook qué difícil es saber algo de la gente por la red. Los mails están totalmente pasados de moda y los blogs medio que también.
Muchos besitos primor!!! Espero que todo genial!
MUAKA
Publicar un comentario