Porque hay cosas que nunca se acaban, pase el tiempo que pase...

Y ahí siguen tantas y tantas canciones haciéndonos pensar, a los que fuimos demasiado pequeños en ese otro tiempo para disfrutarlas, que siempre estamos a tiempo para hacerlo.
¡Porque las canciones no se acaban! Y entonces sentimos nostalgia de una época que ni siquiera hemos vivido.
Por lo menos a mí me pasa.
Y hoy, no sé por qué, le ha tocado a Blondie.