22 de febrero de 2006



Haciendo una compra de última hora para una cena improvisada, en un mercadona repleto de estudiantes a los que seguramente les había pasado lo mismo que a mí, oigo de repente la voz de un niño pequeño cantando: Soy un electroduende y nadie me comprende...!
¡Y no habíamos vuelto a los 80... !

2 comentarios:

Oreja dijo...

Qué tiene esta bola que a todo el mundo le mooooola...?

Anónimo dijo...

jajajaja, no todo está perdido!